viernes, 7 de noviembre de 2008

Volar


Debe ser uno de los anhelos más antiguos del hombre. Planear. Dejarse mecer por el viento mientras ves ciudades desde el aire.



Antes, cuando vivía al lado del mar, era capaz de pasarme las horas muertas viendo planear gaviotas sobre la playa. Esas tardes grises de viento asurado y loco que precede a los temporales en mi pueblo, las gaviotas extienden las alas y son capaces de despegar en vertical, como una cometa, pero sin hilos, sin nada que las ate a tierra. Se mantienen muchísimo tiempo sin batir las alas, navegando sólo con viento, a veces jugando entre ellas. Dejándose arrastrar suavemente, ladeándose un poco, cayendo, cayendo hasta que ¡ups! otra ráfaga las restituye a su lugar. Se reunen varias en formación. Parece un escuadrón de stukas a punto de atacar. Pero no puede haber nada más tranquilo y placentero. Pereza pura. Remolonear en el aire. ¡Qué envidia!

7 comentarios:

Alberich dijo...

Si...

...q envidia!!

Eli dijo...

Paradójicamente volar es una de mis peores pesadillas recurrentes.
No por el hecho de volar, sino porque me persiguen por tierra y no puedo bajar a pesar de que estoy agotada.

Además, te confieso una cosilla, jeje: me aterran la mayoría de cosas que vuelan. Me refiero a seres vivos. Quizá por esos movimientos tan rápidos que no soy capaz de controlar, no sé...
Pero pocas cosas me dan más miedo.
Sin embargo, adoro los aviones.
Quizá sean para mí el equivalente de tus anhelos: viajar, escapar, alejarse...

Juan dijo...

Hay una forma de volar....con la imaginación. Puedes llegar a sentirlo como algo absolutamente real. Yo dejo la mente en blanco y lo consigo. Me da la impresión que tú también lo has conseguido alguna vez, mientras contemplabas esas gaviotas.

Un abrazo. Bonita entrada.

Jose dijo...

Me encantaria poder volar!!!la mayoria de mis sueños placenteros es que vuelo, es como una sensacion de volar...... has escuchado "wish I could fly" de roxette?

Cris dijo...

A mi también me gustaría volar. Parece que siempre nos gusta lo que no podemos hacer.
Pero como dice Juan, otra forma de volar es con la imaginación.

Lal dijo...

Pues volar es algo que yo nunca he deseado, y no por mi vértigo, que sería un impedimento, sino simplemente porque no lo necesito. Prefiero que sean otros los que lo hagan, como es gaviota. Y ahí sí que tengo una necesidad, y es que me dejen verlos volar...

Anónimo dijo...

Bien, que nos topamos con uno de los sueños mas añejos de la humanidad y me encanta hacerlo pese a los accidentes, y recientemente he perdido amigos en un vuelo; gente muy jóven con gran futuro y porvenir, una mujer y tres hombres, todos con hijos pequeños. Sí de reencarnar se trata, me gustaría ser ave. Es cierto, la imaginación nos permite hacerlo, pero realizarlo por uno mismo, con los medios para sortear los vientos, con las alas desplegadas es más que sueño o proyección mental.