lunes, 26 de enero de 2009

Tremenduskah




Les presento a Tremenduskah. Dicen los cronistas oficiales de su corte que es una princesa dura, temible y cruel. Pero en realidad su nombre no viene de eso, sino de su capacidad innata para tomárselo todo a la tremenda. Es capaz de construir un castillo lleno de monstruos (y monstruas, ya que cree en la paridad) con una baraja francesa. Su llanto es capaz de secar los ramos de novia más frescos, y los gatos del cementerio de su palacio son pardos tanto de día como de noche. Ella es así.

Aunque en honor a la verdad, hay que decir que se le pasa pronto, nunca le dura demasiado, y es capaz de reirse con sus amigos, cortar rabos de lagartija y despellejar a otras princesas de reinos vecinos, como cualquiera.

De parte de Tremenduskah, gracias a todos los que habéis dado muestras de apoyo y cariño estos días. Esta si que va por ustedes:


11 comentarios:

Sra de Zafón dijo...

Ya entré hace un rato, en cuanto vi a Tremenduska. Soy una fan desatada de Rebeca Dautremer y por ella llegué a Philippe Leechermeier.
Al final no se cual de los dos, dado que Rebeca intervino también en el texto de este gran cuento, es el autor de estas hermosas palabras que te dedico:
LÁGRIMAS:
Las lágrimas de princesa, están muy solicitadas. Buscadas por el mundo entero, durante largo tiempo, las caravanas cruzaban mares y desiertos para comerciar con ellas.
Son utilizadas como tinta simpática, y con ellas se escriben las canciones más dulces, los poemas más bellos, las cartas de amor más apasionadas.
Para las cartas de ruptura y de insulto, se deben...
utilizar, lagrimas de cocodrilo.
Si tienes el cuento ya sabes que estas últimas palabras están desprendidas del párrafo.

Un beso y gracias por traer a Tremenduska.

Lenka dijo...

Todos somos Tremenduska alguna vez. Gracias por recordárnoslo, Ina. Y por Silvio!!!!

Eli dijo...

Además, esa Tremenduskah es una tía simpática y ni la mitad de terrible de lo que ella cree.
Y como no hay princesas sin hadas, aquí te mando un montón de sus bezitoz (que son taumatúrgicos. Los guardo para ocasiones muy especiales.

Juan dijo...

Jajajaja, Tremenduska, jajajajaja. Me ha gustado Ina. Y Silvio, jo, con su rabo de nube y su testamento.

Se pueden hacer muchos cuentos similares: patetuska, sufrimientuska, fartuska, optimistuska, avaruska, jajajajaja.

Un abrazo Ina. Te echaba de menos por estos lares.

Alberich dijo...

un enormushko abrazushko!!!

Kaken dijo...

Por aqui huele a magia y me he colado, antes de que nadie me robe MI rabo de nube y a tiempo para recuperar una de mis palabras favoritas: bezitoz¡, me encanta, Eli.

Yo me he avergonzado muchas veces si me he puesto tremenda..pero que levante el dedillo a quién no le haya ocurrido nunca.

Que cosa más curiosa, siempre he llamado Anushka a mi prima Ana, a sus treintaytantos sigue superando su parálisis cerebral.
Ina, va a ser que el "ushka" en realidad engrandece....

Un bes

Cris dijo...

Pues la Tremendusca que yo conozco es una gran persona.
Y creo que todos somos Tremenduscas. Muchos besos, Ina.

Lal dijo...

Yo me he perdido algo, seguro, pero te mando un tremendo abrazo.
Muak!

Laura dijo...

Yo debo ser tocaya de Tremenduska porque ultimamente me lo tomo todo a la barbarie.
Un saludo desde mi Diván.

Jose dijo...

Y menos mal que de vez en cuando nos sale esa princesa que tenemos dentro!!! si las aguas vuelven a su cauce, m'alegro ;) mil besos!!

Jose dijo...

aunqe hace años que no escribe por aqui, tiene usted un premio en mi blog. pasate cuando puedas y cuentame un poco que es de ti!!que se te echa de menos!!